Mientras desde el municipio de Virasoro, el intendente Emiliano Fernández, anunciaba con bombos y platillos ser recibido por un ministro de la Nación que al otro día renunció, y también mientras todos saben que la relación entre el jefe comunal y el gobierno provincial no pasa por su mejor momento debido a las constantes declaraciones de Fernández Recalde contra la gestión provincial con el único propósito de un posicionamiento político personal que se podría tildar de mezquino porque priva al pueblo de Virasoro de acceso a varias cuestiones; en tanto el Presidente de la Cooperativa de Servicios Públicos, Daniel Sedqueira, en silencio llega mucho más allá.
Si bien hay que recalcar que del lado del Gobernador Valdés se sigue apostando y apoyando el crecimiento de Virasoro mediante distintas asistencias y apoyos en áreas como lo Social, también en medidas concretas que tienden a propiciar la inversión industrial y la generación de empleo como por ejemplo en los parques industriales o en nuevos emprendimientos como el mega aserradero que se instala en zona de San Alonso.
Decíamos, Sequeira, a quienes muchos con cierto grado de mezquindad y hasta discriminación, tildan de “Mencho”, en silencio demuestra gran poder de Gestión y también de contactos para llegar más alto.
Hace pocos días lo vimos con el Gobernador Valdés, muy cómos y a gusto, de ambos lados. Pero como si esto fuese poco, mientras Fernández se reunía con el ministro que a las 24 horas renunció, Sequeira junto a Milena Novarini y Alberto Larenti se reunía en Buenos Aires con alguien que hoy por hoy es casi imposible, con el Ministro de Economía Sergio Maza, también con Katopodis de Obras Públicas, con Wado de Pedro el jefe de gabinete, con Néstor Álvarez de ENOHSA y por si faltaba más, con Malena Galmarini la titular de AySA, ente máximo en cuestiones de agua y obras sanitarias de la Nación.
Como diría un chamamé… “Mencho, de los buenos y a mucha honra”